"Yo soy el que vive"Ap.1,18: octubre 2018

ADORACION

MOVIMIENTO DIOCESANO DE ADORACION EUCARÍSTICA PERPETUA - SAENZ 572 - LOMAS DE ZAMORA


¡JESÚS TE ESPERA SIEMPRE!

¡DECÍDETE A VISITARLO!

TE INVITAMOS A LA COMUNIDAD DE ADORADORES

Capilla "María Reina de los Apóstoles"

Capilla "María Reina de los Apóstoles"
Capilla "María Reina de los Apóstoles"

domingo, 21 de octubre de 2018

LA ADORACIÓN EUCARÍSTICA SALVARÁ AL MUNDO A LA FAMILIA Y A LA IGLESIA

“Estamos atribulados por todas partes, pero no abatidos
Perplejos, pero no desesperados
Perseguidos, pero no abandonados
Derribados, pero no aniquilados”  -2 Cor. 4, 8-9-


Los seguidores de Cristo discípulos-misioneros, caminamos a la casa del Padre en este tiempo de sobrada confusión, como en otros tiempos de la historia, desafiando al martirio, a la persecución, al desprecio e incomprensión, como El Maestro.
Como nos recuerda San Pablo: “Así, aunque vivimos, estamos siempre enfrentando a la muerte por causa de Jesús, para que la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal” -2 Cor. 4,11-
No nos abandonamos ni nos rendimos a los vientos que corren, ni desparramamos confusión para acomodarnos a los empecinamientos del mundo, a la seducción del demonio y a la hipocresía narcisista.
“Porque el que no recoge conmigo desparrama” dice El Señor.
En nuestra debilidad es Cristo que triunfa.
San Pablo nos recuerda: “Nosotros llevamos ese tesoro en recipientes de barro, para que se vea bien, que este poder extraordinario, no procede de nosotros, sino de Dios” -2 Cor. 4,7-
No podemos caminar con la cruz de cada día, ni emprender una gesta misionera de cualquier tipo, ni llevar adelante un ministerio ordinario o extraordinario, sin tener intimidad con El Señor en el silencio de la contemplación con la Persona Viva de Cristo en el Santísimo Sacramento.
Porque se esteriliza la noble y santa misión y el llamado, se entumece, se desvanece con los embates del demonio, y al final se enfría el amor que teníamos al comienzo.
El Señor de la Historia camina a nuestro lado, para que firmes en la fe, robustecidos en la esperanza y con el ardor del Amor, impregnemos a nuestros hermanos con el perfume de Cristo.
Con el arma del Rosario en las manos vamos abonando, disponiendo el terreno del corazón, para que la Palabra Viva y eficaz nos purifique y santifique nuestra vida y de fecundidad a la Obra de Sus Manos.
El adorador frente a la Persona Viva de Jesús Sacramentado va sanando el corazón por el camino de la oración y conversión permanente que se manifiesta en los testimonios y en la coherencia de vida.
El adorador por el llamado se convierte en intercesor de las necesidades de la Iglesia, de la Patria, de la familia, del mundo y el cosmos.
San Juan Pablo II decía: Por medio de la Adoración, el cristiano contribuye misteriosamente a la transformación del mundo y la siembra del Evangelio. Quien ora/Adora al Salvador Eucarístico trae al mundo con él y lo eleva a Dios. Los que están ante El Señor, están cumpliendo un servicio eminente. Están presentando a Cristo a todos. Aquellos que no lo conocen o que están lejos de Él. Ellos adoran en Su Presencia en lugar de aquellos” (Carta 1996).
María Reina de la Paz y Reina del mundo entero quiere educar nuestro corazón en el Amor de Su Hijo para que podamos mirar al mundo y a nuestros hermanos con la mirada de Cristo.
Esta reflexión, en este tiempo de tribulación, es una invitación a darnos cuenta de la importancia y dimensión de la Adoración Eucarística, del Amor de Dios derramado en nuestra vida, frente a los ataques del demonio para destruir a la persona, a la familia y a la Iglesia.



¡Alabado sea Jesucristo!

E.M.M.